Aescape, una empresa estadounidense, ha creado un robot masajista que combina tecnología avanzada con confort, este robot ofrece 20 tipos de masajes personalizados, utilizando brazos robóticos ajustables y una función de regulación de temperatura. El usuario se coloca un traje especial, llamado Aerware, que protege la piel y maximiza la eficacia del masaje.
El proceso comienza con un escaneo corporal 3D realizado por sensores infrarrojos en la camilla. Luego, los brazos robóticos, conocidos como Airpoints, inician la sesión de masaje, emulando las manos de un fisioterapeuta. El usuario puede seleccionar el tipo de masaje, ajustar la presión y elegir la música a través de una app o una pantalla integrada.
La seguridad es una prioridad para Aescape. El robot cuenta con sensores que monitorean la presión aplicada, evitando cualquier riesgo de lesión. Además, incluye un botón de parada de emergencia para detener la sesión en caso de incomodidad.
Actualmente, hay dos robots disponibles para el público, ubicados en Nueva York. Uno en el spa del hotel Lotte New York Palace y el otro en Union Square. Las citas se pueden reservar en la página web de Aescape, con un precio inicial de USD 75 dólares.
Aescape no busca reemplazar a los masajistas y fisioterapeutas humanos, sino complementar su trabajo. La automatización de ciertas tareas permite a los profesionales enfocarse en aspectos más complejos, mejorando la calidad de la atención y ofreciendo una mejor experiencia al cliente.