Robbie Williams encendió las alarmas al contar que perdió parte de su visión y teme que el daño avance. Según explicó, el problema comenzó después de usar inyectables para bajar de peso.
Desde entonces, nota borrosidad persistente y, en sus conciertos, ya no distingue las caras del público. Cambió de gafas, pero la situación no mejora. Según Robbie, esta situación le preocupa mucho.
El cantante admitió que teme quedarse ciego de un ojo. Por eso, pidió reflexionar sobre los riesgos reales de estos medicamentos. Señaló que la búsqueda de resultados rápidos puede salir caro y sugirió informarse bien antes de usarlos.

En paralelo, algunas investigaciones han advertido posibles daños en el nervio óptico asociados a ciertos tratamientos; el debate sobre la seguridad y el impacto visual de estas terapias se reaviva. Los problemas de Robbie Williams añaden una dimensión personal a este debate.
Por ahora, el testimonio del artista suma una voz de alerta en medio del auge de los fármacos para adelgazar. Si presentas síntomas oculares como visión borrosa, dolor o pérdida de campo visual, busca atención médica. Solo un especialista puede evaluar causas, descartar riesgos y ajustar tratamientos.






