Ciencia y tecnología

Un volcán en Indonesia ‘alertó’ de una erupción y tsunami mortales, según estudio

Foto tomada de Internet - Wikipedia.

Un reciente estudio basado en datos satelitales ha revelado que la ladera del volcán Anak Krakatau, en Indonesia, estuvo deslizándose durante años y aceleró su movimiento antes de la devastadora erupción de 2018.

El equipo de investigadores de la Universidad de Penn State, encargado del análisis, concluyó que esta información podría haber servido como una advertencia temprana del colapso que provocó un potente tsunami. Este desastre natural dejó cientos de fallecidos y miles de heridos en las islas cercanas de Java y Sumatra, según detalla un estudio publicado en la revista Geophysical Research Letters.

De acuerdo con la profesora asociada de geociencias en Penn State, Christelle Wauthier, los volcanes oceánicos inestables pueden colapsar de forma repentina y generar tsunamis devastadores. En 2018, más de 400 personas perdieron la vida debido a la falta de monitoreo en el terreno, lo que impidió detectar la aceleración del deslizamiento y prever el colapso inminente.

Los investigadores analizaron datos recopilados entre 2006 y 2018 mediante la técnica de Radar de Apertura Sintética Interferométrica (InSAR), la cual permite rastrear la deformación del suelo con gran precisión. Gracias a esto, descubrieron que la falla de desprendimiento del volcán experimentó un deslizamiento de aproximadamente 15 metros en ese periodo, con una aceleración notable justo antes de la erupción.

Para este estudio, los científicos utilizaron información de tres satélites (ALOS-1, COSMO-SkyMED y Sentinel 1) y procesaron cientos de imágenes de radar mediante el sistema de computación de alto rendimiento Roar, de Penn State. Aunque la técnica InSAR no es nueva, pocas veces se ha empleado con un volumen de datos tan amplio, lo que requirió una enorme capacidad de almacenamiento y procesamiento.

Los investigadores destacan que esta tecnología tiene el potencial de mejorar el monitoreo de volcanes oceánicos activos, especialmente en zonas donde no existen otros sistemas de vigilancia, como GPS terrestre. El costo y la dificultad de instalar equipos en volcanes en erupción han sido obstáculos para un monitoreo efectivo, pero el análisis satelital podría ser clave para anticipar futuros colapsos.

El estudio demuestra que la deformación del Anak Krakatau ya mostraba signos de alerta antes de su colapso. Según Wauthier, la observación de estos movimientos a lo largo del tiempo es fundamental, ya que una aceleración progresiva podría indicar que un volcán está al borde de un derrumbe catastrófico.