Los Gobiernos de Ecuador y Colombia presentaron oficialmente los resultados del proyecto “Manejo Integrado de los Recursos Hídricos de las Cuencas Binacionales Mira, Mataje y Carchi–Guáitara”, una iniciativa que durante cinco años benefició a más de 94.000 personas en la zona fronteriza y que marca un nuevo avance en la gobernanza del agua compartida.
El proyecto fue liderado por los Ministerios de Ambiente de ambos países, implementado por el PNUD y financiado por el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF). Durante el evento de cierre, realizado en Quito, se destacaron hitos técnicos e institucionales que servirán como guía para la cooperación futura.
Entre los principales resultados se encuentran el Análisis de Diagnóstico Transfronterizo (ADT) y el Programa de Acción Estratégica (PAE), documentos que identifican los desafíos comunes en las cuencas y definen las prioridades de gestión hídrica. “El PAE se consolida como una guía técnica y política para la cooperación futura”, afirmó Freddy Muñoz, viceministro de Agua del Ecuador.
El proyecto logró el 100 % de sus 20 indicadores, articulando a instituciones públicas, gobiernos locales y comunidades indígenas y afrodescendientes. Las acciones incluyeron mejoras en saneamiento, protección de fuentes hídricas y fortalecimiento de capacidades locales.
Entre las iniciativas destacadas están:
- El Plan de Vida de la Comarca Afroecuatoriana del Norte de Esmeraldas,
- El Plan de gobernanza hídrica intercultural de la Gran Familia Awá Binacional,
- El Estudio de alcantarillado sanitario de Tufiño,
- Prácticas agro-sostenibles en Pimampiro,
- El Programa de producción más limpia en Cumbal,
- Y el fortalecimiento de la cooperativa COOPSERCUM.
Además, más de 1.400 personas participaron en procesos formativos sobre gestión del agua e hidrodiplomacia.
La representante del Ministerio de Ambiente de Colombia, Camila Gómez, destacó que el trabajo conjunto demuestra “que la cooperación técnica y la participación ciudadana son clave para una gestión eficiente y responsable del recurso hídrico”. Añadió que estos resultados consolidan un modelo regional que protege los ecosistemas y mejora el bienestar comunitario.
Con el cierre del proyecto, ambas naciones anunciaron que inicia una nueva fase: la implementación del PAE y el fortalecimiento de la cooperación técnica y comunitaria en el territorio.






