Kim Kardashian, la indiscutible reina de la moda y empresaria detrás de SKIMS, lo hizo de nuevo: desató una tormenta en las redes sociales con su lanzamiento más polémico. La marca de la socialité ahora vende una línea de ropa interior que incorpora vello púbico sintético.
Bajo el nombre de colección SKIMS ‘Bush’ (Arbusto), la pieza que acapara toda la atención es una microtanga que incluye un pequeño parche de pelo sintético en la parte delantera, diseñado para simular el vello corporal natural. ¿El precio de la polémica? Unos 32 dólares.

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El debate explota en Internet
La reacción en las plataformas digitales fue inmediata y se polarizó al extremo. Por un lado, una facción de usuarios aplaudió la creación, calificándola como una declaración audaz a favor de la aceptación del cuerpo sin depilar. Celebran que Kardashian desafíe los estrictos estándares de belleza que dictaron la depilación total durante años.
Por otro lado, la lencería causó consternación. Muchos usuarios catalogan el producto como innecesario, antihigiénico y, sencillamente, «algo que nadie pidió».
Según reportes de medios como The Independent, SKIMS responde con esta colección a una creciente tendencia global que favorece un regreso a lo natural. Al ofrecer un accesorio que imita el vello, Kardashian busca normalizar una parte del cuerpo que, para muchas personas, se convierte en fuente de complejos.
Polémica asegurada, stock agotado
El lanzamiento incluye tangas y otros modelos de ropa interior con la misma característica. Y aquí viene el golpe de marketing maestro: a pesar de las críticas, la tanga ya se encuentra agotada y la tienda oficial de SKIMS activó una lista de espera para reponer unidades.
E! Online señala que este paso es coherente con la estrategia de SKIMS de promover soluciones inclusivas y diversas. En este caso, la diversidad se amplía para incluir estilos de vello corporal.
Independientemente de la opinión pública, la fórmula de polémica y shock demuestra su éxito. La controversia asegura que el producto, y la filosofía que lo respalda, se convierta en el tema de conversación dominante en todas las plataformas digitales, traduciéndose rápidamente en ventas masivas. Kim Kardashian sabe cómo hacer que el mundo hable de ella.

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