Este jueves 28 de noviembre de 2024, el Presidente de la República, Daniel Noboa, recorrió las instalaciones de la Unidad Comunitaria Bilingüe Atahualpan en Otavalo, provincia de Imbabura.
El proyecto cuenta con una inversión de 3.7 millones de dólares y está equipado con dos bloques para educación inicial, 30 aulas para educación básica y bachillerato, una biblioteca, comedor, salón de uso múltiple, laboratorios, sala de profesores, oficinas administrativas, bar, cuarto de bombas, cisternas, transformadores, generador, canchas deportivas, espacios verdes, un altar patrio, parqueadero y áreas exteriores.
El Presidente Daniel Noboa afirmó: «Estas son realidades, no promesas como: escuelitas de papel, escuelitas de contratos millonarios botadas en la basura. Esta es una infraestructura real en la que hemos invertido 3.7 millones de dólares y acogerá a 2.280 niños en sus dos jornadas».
Además, Noboa destacó los esfuerzos de su Gobierno en el ámbito educativo: «A nivel nacional hemos invertido 87 millones de dólares para mejorar la infraestructura educativa, beneficiando a más de 14 mil estudiantes. Así también hemos entregado raciones alimenticias a 2.8 millones de estudiantes en 12.872 instituciones educativas en todo el país. Esto lo hemos hecho en un año de Gobierno y solo es el inicio de la transformación de la educación de niñez y juventud ecuatoriana».
El Primer Mandatario también mencionó sobre el impacto de una educación de calidad: «Los niños y jóvenes con una buena educación serán hombres y mujeres líderes, emprendedores, críticos, agentes de cambio que no creerán más en políticos, que ahora se encuentran en el exilio, políticos que desfalcaron al Ecuador y nos dejaron sin escuelas, sin hospitales, sin universidades, nos dejaron sumergidos en la pobreza, narcotráfico y en la inseguridad».
El Presidente Noboa resaltó la importancia de la identidad y el compromiso comunitario en la formación educativa: «Aquí los estudiantes no solo recibirán una educación de calidad, sino que también aprenderán a valorar sus raíces, su identidad y su comportamiento con compromiso con la comunidad. Niños y niñas, quiero decirles que están construyendo su propio futuro y con cada paso que dan están dejando una huella que contribuirá a su desarrollo, al de su familia, a la comunidad y, por supuesto, a todo el Ecuador», concluyó.