El Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Ambiente y Energía (MAE), aprobó 11 proyectos de riego en las provincias de Cotopaxi, Tungurahua y Chimborazo, con una inversión total de USD 6,5 millones, destinados a impulsar la producción agrícola y mejorar la calidad de vida de más de 8.600 habitantes de la Sierra Centro del Ecuador.
Las iniciativas forman parte del Plan Nacional de Riego y Drenaje 2021–2026 y recibieron la viabilidad técnica, informes de pertinencia y concordancia, lo que habilita su ejecución por parte de los Gobiernos Autónomos Descentralizados Provinciales.
Más de 1.200 hectáreas serán intervenidas
Los proyectos permitirán la intervención de aproximadamente 1.200 hectáreas, fortaleciendo la productividad agrícola, la economía campesina y la resiliencia de los territorios rurales frente a los efectos del cambio climático.
Durante el segundo semestre de 2025, las prefecturas de Cotopaxi, Tungurahua y Chimborazo presentaron las propuestas de inversión y preinversión, las cuales fueron evaluadas de manera técnica, responsable y transparente por el MAE, en un trabajo articulado entre el Gobierno Nacional y los gobiernos provinciales.
Inversión por provincia
La distribución de los recursos aprobados es la siguiente:
- Cotopaxi: USD 1’849.695,53, destinados a proyectos de riego tecnificado, embalses y mejoramiento de reservorios comunitarios.
- Chimborazo: USD 2’133.338,03, para el estudio de factibilidad y diseño definitivo del sistema de riego Chambo–Guano–Los Chingazos.
- Tungurahua: USD 2’553.627,07, orientados a la implementación y rehabilitación de sistemas de riego tecnificado, acequias y canales principales en varios cantones.
Transferencia oportuna de recursos a las prefecturas
Con la culminación del proceso de revisión y aprobación correspondiente al año 2025, el Ministerio de Ambiente y Energía garantiza la transferencia oportuna de los recursos a las prefecturas, en cumplimiento del proceso de descentralización y la normativa vigente.
Desde el Gobierno se destacó que cada proyecto aprobado representa una oportunidad para garantizar el acceso equitativo al agua, mejorar la producción del campo y fortalecer las condiciones de vida de las familias agricultoras.

