El presidente de la República, Daniel Noboa Azín, firmó el Decreto Ejecutivo No. 28 que ordena el traslado de la Comandancia General de la Policía Nacional a Guayaquil, en un movimiento estratégico que busca fortalecer el control de la seguridad desde una de las zonas más golpeadas por la violencia y el crimen organizado en el país.
La medida, oficializada este 13 de junio, establece que tanto la Policía Nacional como el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas ejercerán temporalmente sus funciones desde Guayaquil dejando sin efecto el Decreto Ejecutivo 290 del 3 de junio de 2024, que había establecido su traslado a Manta.
“Es necesario que la Policía Nacional ejerza el mando directivo operacional en el territorio donde el país más lo necesita”, señala el decreto, que también ordena al Ministerio del Interior y al Comandante General de la Policía Nacional ejecutar las acciones necesarias para concretar el traslado.
De igual forma, el Ministerio de Defensa Nacional y el Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas deberán movilizar sus operaciones estratégicas a Guayaquil, una ciudad que se ha convertido en epicentro del conflicto contra el narcotráfico, los homicidios y las mafias trasnacionales.
Disposiciones adicionales del traslado de la Comandancia de Policía a Guayaquil
La disposición contempla además la coordinación con el Ministerio de Economía y Finanzas, la Secretaría Nacional de Planificación y el Ministerio del Trabajo para facilitar los aspectos logísticos y presupuestarios de la medida.
Esta decisión se enmarca en una política gubernamental de descentralización operativa de las fuerzas del orden, buscando mayor capacidad de respuesta inmediata y articulación directa con la realidad territorial de la violencia.
Con este decreto, el presidente Noboa da un nuevo paso en su estrategia de seguridad, que apunta a desplazar el eje de decisiones de Quito a zonas críticas del país. El traslado físico del alto mando policial y militar a Guayaquil refuerza el mensaje de que el combate a la delincuencia organizada será frontal, sin concesiones y con presencia permanente en el territorio más afectado.