La cerveza, una de las bebidas más consumidas del mundo, puede tener efectos positivos y negativos en la salud. Es una bebida fermentada a base de granos como cebada o trigo, aporta vitaminas como la B12 y niacina, además de fósforo y agua.
Sin embargo, su contenido alcohólico (5%) y calorías vacías requieren un consumo moderado para evitar problemas de salud.
¿Qué efectos tiene la cerveza en los riñones?
El alcohol en la cerveza afecta el equilibrio de líquidos del cuerpo, ya que deshidrata y sobrecarga a los riñones en su tarea de filtrar la sangre y eliminar desechos.
- Riesgos inmediatos:
- Deshidratación por el efecto diurético del alcohol.
- Interferencia con la hormona antidiurética, esencial para la reabsorción de agua en los riñones.
- Riesgos a largo plazo:
- Cálculos renales: El aumento de peso provocado por las calorías vacías de la cerveza presiona a los riñones, incrementando el riesgo de formación de cálculos.
- Insuficiencia renal: El consumo excesivo de alcohol puede provocar necrosis tubular aguda , un daño severo que puede derivar en insuficiencia renal crónica.
¿Qué pasa si tomo cerveza todos los días?
- Deshidratar el cuerpo, afectando la función renal.
- Aumentar el riesgo de problemas renales preexistentes.
- Generar un desequilibrio en los mecanismos de filtrado, aumentando la probabilidad de enfermedad renal crónica.
Según la OMS , el consumo de alcohol es responsable de más de 300.000 muertes al año en la Región de las Américas. Entre 2013 y 2015, un promedio de 85.000 muertes anuales estuvieron asociadas directamente al consumo de alcohol.
Además, la dependencia al alcohol afecta a 209 millones de personas en todo el mundo, según un informe de 2019.