En un giro inesperado para la movilidad sostenible, la ciudad de Barcelona, España, ha puesto en marcha un proyecto piloto que utiliza un recurso poco convencional para propulsar un autobús: excremento humano.
Esta iniciativa, liderada por la empresa de transportes TMB, busca demostrar el potencial del biometano renovable como una alternativa limpia al gas natural.
El vehículo, conocido…