Morderse las uñas, conocido como onicofagia, es más que un simple «tic». Este hábito compulsivo afecta a muchas personas, especialmente durante la niñez y la adolescencia, y suele desencadenarse en situaciones de estrés, ansiedad o nerviosismo.
Este comportamiento puede tener consecuencias tanto físicas como emocionales, desde deformaciones en la cutícula hasta problemas dentales y…