Los cuidadores de Tamá saben que no están ante un oso andino cualquiera. Negro, de antifaz blanco y de 174 kilos, el animal es considerado un «escapista» por fugarse de un zoológico a las afuera de Bogotá en 2022.
El oso rebelde, de ocho años, fue escuchado. Hoy un equipo de biólogos y veterinarios lo preparan para un eventual regreso a los bosques de los Andes…