Un cocodrilo de agua salada de 3.6 metros fue abatido por la Policía en Bulla, al norte de Australia, tras devorar mascotas y amenazar a niños. La comunidad, siguiendo una tradición, transformó al depredador en un festín para celebrar el fin de la amenaza.
La Policía del Territorio del Norte había informado que el cocodrilo representaba un peligro inminente, ya que acechaba a niños y…