sábado, 26 julio 2025
Tendencias
Ciencia y tecnología

Según un estudio, los primeros europeos tenían piel, ojos y cabello oscuros

Aunque hoy en día asociamos a Europa del norte con cabellos rubios y ojos claros, esto no siempre fue así. De acuerdo con un estudio liderado por la genetista Silvia Ghirotto, de la Universidad de Ferrara (Italia), los primeros europeos tenían en su mayoría piel oscura, ojos oscuros y cabello oscuro.

Este descubrimiento, basado en el análisis de ADN antiguo, desmonta el mito de que los rasgos claros han sido predominantes en el continente desde tiempos remotos.

Un estudio basado en muestras arqueológicas

Para llegar a esta conclusión, el equipo de Ghirotto analizó 348 muestras de ADN antiguo provenientes de 34 países de Europa Occidental y Asia. Algunas databan de hace 45.000 años, como el caso del individuo Ust’-Ishim de Siberia, y otras más recientes, como el individuo SF12 de Suecia, con una antigüedad de 9.000 años.

A pesar de que muchas muestras estaban degradadas, los investigadores lograron utilizar modelos estadísticos avanzados para predecir las características de pigmentación de los antiguos habitantes del continente.

Rasgos heredados de África

Según el estudio, los primeros Homo sapiens que se establecieron en Europa hace entre 50.000 y 60.000 años no se diferenciaban genéticamente de sus ancestros africanos. Por tanto, era común que conservaran pigmentación oscura en piel, ojos y cabello.

Incluso durante la Edad del Cobre, hace unos 5.000 años, el 63 % de los europeos tenía la piel oscura, y solo el 8 % presentaba piel clara. Los rasgos claros eran una rareza genética hasta bien entrada la Edad de Hierro, hace unos 3.000 años.

¿Por qué surgieron los rasgos claros?

Los investigadores plantean que la piel clara podría haber representado una ventaja evolutiva en regiones con poca luz solar. En zonas como Escandinavia, una piel más clara habría permitido una mejor síntesis de vitamina D, esencial para la salud ósea y muscular.

En contraste, los ojos azules o verdes no parecen haber ofrecido beneficios funcionales claros. La genetista Ghirotto señala que estos podrían haberse popularizado por selección sexual o simplemente por azar genético.

¿Influyó el clima en la evolución de los europeos?

Aunque aún faltan estudios para determinar todas las causas, los cambios climáticos y las migraciones podrían haber tenido un papel clave en la expansión de los rasgos claros en Europa. Las características genéticas comenzaron a acumularse especialmente en el norte, en países como Noruega, Suecia y Finlandia, donde hoy más del 80 % de la población es rubia por naturaleza.

No obstante, en el resto de Europa, el cabello castaño sigue siendo el más común, y solo el 2 % de la población mundial es rubia natural, lo que mantiene estos rasgos como una minoría a nivel global.

Esto te puede interesar: