El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés) detendrá a toda persona en situación irregular, incluso si no tiene antecedentes criminales. Así lo afirmó su jefe interino, Todd Lyons, en una entrevista con CBS News, donde explicó el giro radical que ha tomado la política migratoria del país tras el inicio del segundo mandato de Donald Trump.
“Si encontramos a alguien que está en el país ilegalmente, lo tomaremos bajo custodia”, declaró Lyons. “Hemos abierto todo el espectro de la cartera migratoria”.
Redadas colaterales y regreso de operativos laborales
Bajo esta nueva directriz, el ICE retoma las redadas colaterales, es decir, detenciones de personas que no eran el objetivo principal de la operación pero que se encontraban sin papeles. Estas prácticas habían sido restringidas durante la administración de Joe Biden, que priorizaba a inmigrantes con antecedentes graves.
Ahora, ICE vuelve a las calles con operativos en comunidades, centros de trabajo y lugares públicos, incluyendo tribunales y plantas industriales. Recientemente, una operación en una planta de cannabis en California dejó más de 300 detenidos, incluidos 10 menores.
Más fondos y meta de un millón de deportaciones
Con una inyección multimillonaria de fondos federales, el ICE tiene ahora la meta de alcanzar 1 millón de deportaciones en un año, según explicó Lyons. Entre enero y junio de 2025, la agencia ya deportó a 150.000 personas, 70.000 de ellas con condenas, aunque en su mayoría por infracciones menores.
Empleadores también serán perseguidos
Lyons aseguró que los empleadores también serán investigados y sancionados si contratan o explotan a inmigrantes sin documentos.
“No solo perseguimos a quienes trabajan ilegalmente, también a las empresas que se benefician de eso”, advirtió. “No es un crimen sin víctimas”.
Críticas y preocupaciones
Organizaciones proinmigrantes han expresado su rechazo a las nuevas medidas, argumentando que aumentan el miedo en comunidades latinas y de otras minorías. También hay preocupación entre empresarios agrícolas y del sector gastronómico, por la posible escasez de mano de obra.
A pesar de ello, la administración federal sostiene que esta política restaura el estado de derecho y fortalece la rendición de cuentas en todo el sistema migratorio.
Seguridad y protección de agentes
Lyons también confirmó que los agentes del ICE seguirán usando máscaras y protocolos de seguridad durante los operativos, especialmente en zonas consideradas de alto riesgo.
“Nos encantaría enfocarnos en criminales dentro de centros de detención, pero las ‘ciudades santuario’ nos obligan a salir a las calles”, concluyó.