La selección de Ecuador, con su boleto asegurado para el Mundial de 2026, se enfrenta a Paraguay en un partido que, si bien no tiene la presión de la clasificación para la Tri, es vital para la Albirroja, que se juega su cupo a la cita mundialista.
El encuentro, que se disputará a las 18:30, tendrá un sabor especial, ya que la selección paraguaya es dirigida por Gustavo Alfaro, el estratega que guió a Ecuador al Mundial de Qatar 2022.

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Ecuador y una oportunidad para hacer historia
Para nuestra selección, este partido es la oportunidad perfecta para romper un maleficio: nunca ha logrado ganar un partido por eliminatorias en suelo paraguayo. En las nueve ocasiones en las que se han enfrentado, la Albirroja se ha llevado la victoria.
El exseleccionador de la Tri, Luis Fernando Suárez, destacó el gran momento del equipo, producto de “un trabajo serio y con jugadores con muy buen potencial”, lo que le ha permitido clasificar con dos fechas de anticipación.
Por su parte, el exfutbolista Enrique Vera, con pasado en ambas selecciones, aseguró que “un empate nos dejaría contentos a todos”, ya que “va a ser un partido difícil y complicado como son los de eliminatorias”.
La fortaleza defensiva de la ‘Tri’ y la asignatura pendiente en el ataque
Bajo la dirección de Sebastián Beccacece, Ecuador se ha consolidado como la mejor defensa de las eliminatorias, habiendo recibido tan solo cinco goles en 16 partidos. Según Suárez, este sistema defensivo es una de las armas clave para buscar el triunfo en Asunción.
Sin embargo, el exseleccionador también identificó un área de mejora: el ataque. «Todavía hoy el jugador (de ataque) más importante es Enner (Valencia) y hay que empezar a trabajar en su reemplazo con gente joven».
A pesar de esto, Enrique Vera se mostró optimista sobre el equipo ecuatoriano, destacando que «Ecuador tiene un buen recambio generacional».

Un encuentro con sabor a revancha
Este partido también evoca recuerdos agridulces para las dos naciones. Para el exjugador paraguayo Rambert, el duelo es especial, pues le recuerda la goleada 5-1 que le propinaron a la Tri en 2010, un resultado que fue decisivo en la clasificación de Paraguay al Mundial de Sudáfrica.
En el otro lado de la moneda, ese mismo partido significó la salida de Suárez del banquillo ecuatoriano tras una racha de tres derrotas consecutivas.
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