Las Fuerzas Armadas reforzaron su presencia en Quevedo como parte de las operaciones de control territorial que se ejecutan desde el 21 de noviembre, logrando 25 detenciones, entre ellas objetivos de mediano y alto valor, y el decomiso de más de una tonelada de droga, entre clorhidrato de cocaína y marihuana.
Durante estas acciones también se incautaron armas, municiones, explosivos y más de 2.000 galones de combustible, insumos utilizados por organizaciones criminales para actividades como sicariato, extorsión y microtráfico. Según las autoridades, la neutralización de este material representa un golpe significativo a la logística y capacidad operativa de estas mafias.
Desde tempranas horas de este lunes, un amplio contingente militar se desplegó nuevamente en la ciudad. Las operaciones, descritas como planificadas, sostenidas y de alta intensidad, buscan desarticular estructuras del crimen organizado, capturar a sus operadores y asegurar rutas de movilidad, sectores críticos y puntos donde los grupos delictivos buscan extender su influencia.
Las Fuerzas Armadas confirmaron que mantendrán su despliegue aéreo y terrestre, con patrullajes especializados, controles de carreteras, ocupación de zonas sensibles y presencia permanente de unidades tácticas equipadas.
El Gobierno Nacional y el Bloque de Seguridad reiteraron que no habrá tregua contra las mafias y que las acciones continuarán hasta restablecer la tranquilidad en Quevedo y toda la provincia de Los Ríos.
