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Alamesa, un restaurante donde cocinan y atienden jóvenes neurodiversos

Alamesa, un innovador restaurante ubicado en un rincón de Buenos Aires, Argentina, ha estado transformando la vida de jóvenes neurodiversos desde su apertura el 1 de marzo de 2024. Este proyecto pionero no solo ofrece una experiencia gastronómica única, sino que también busca redefinir paradigmas sobre la integración social y la autonomía.

El médico infectólogo Fernando Polack, mentor de Alamesa, explica que el proyecto nació de la necesidad de brindar a jóvenes con neurodiversidad la oportunidad de tener una vida social plena y significativa. «Alamesa es un cambio en la mirada de la discapacidad: es mirar la integración de una persona desde esa persona y no desde el integrador», enfatiza Polack.

El restaurante emplea a 40 jóvenes neurodiversos de entre 18 y 40 años, quienes desempeñan todas las tareas necesarias para el funcionamiento del establecimiento. Desde la preparación de los platos hasta el servicio de atención al cliente, cada miembro del equipo contribuye de manera activa a la operación diaria del restaurante.

Lo que hace único a Alamesa es su enfoque inclusivo y su compromiso con la autonomía de sus empleados. El restaurante ha sido diseñado para garantizar la seguridad y el éxito de los jóvenes trabajadores. Desde el menú, elaborado por el chef Takehiro Ohno, hasta la señalización del restaurante, todo ha sido cuidadosamente planificado para facilitar la participación de todos.

«Alamesa nació como una antiterapia», explica Polack. «Es una cadena de un poquito mejor, un poquito mejor de 40 personas que alinean la fila. Es una intervención terapéutica impresionante que no fue intencional», agrega.

El proyecto ha generado un profundo impacto en la vida de los jóvenes involucrados. Han experimentado un crecimiento personal significativo y han desarrollado amistades sólidas y significativas. Además, han adquirido habilidades sociales y laborales que les permiten integrarse plenamente en la sociedad.

Alamesa representa más que un restaurante; es un espacio de inclusión, aprendizaje y crecimiento. Ha desafiado las nociones convencionales sobre la discapacidad y ha demostrado que todos, independientemente de sus capacidades, pueden contribuir de manera valiosa a la comunidad.