En un remoto cementerio de Polonia, un equipo de arqueólogos halló los restos de una mujer sepultada con signos de rechazo y temor, apodada «Zosia». Su esqueleto presentaba elementos antimágicos: un candado cerrado en el pie y una hoz de hierro sobre el cuello, rituales para evitar que los muertos regresaran a causar daño.
Liderados por el arqueólogo sueco Oscar Nilsson, los…