Jonathan Majors, reconocido por su participación en películas como «Creed III» y «Ant-Man and the Wasp: Quantumania», ha sido sentenciado a libertad condicional después de ser hallado culpable el año pasado de agresión y acoso contra su exnovia, Grace Jabbari.
La sentencia fue dictada el pasado lunes por el juez de Nueva York Michael Gaffey, quien ordenó a Majors completar un programa de intervención presencial para agresores de 52 semanas, además de continuar con su terapia de salud mental. El actor, quien originalmente enfrentaba una pena máxima de un año de prisión, evitó así ser encarcelado, según informó Associated Press.
El proceso judicial, que se prolongó durante semanas, culminó en diciembre con un veredicto dividido que declaró a Majors culpable de agresión en tercer grado y acoso en segundo grado, aunque fue absuelto de dos cargos similares. Esta condena ha impactado significativamente en su carrera, con estudios de cine abandonando proyectos futuros en los que participaría y empresas de publicidad y gestión retirando su respaldo.
Marvel, en particular, decidió cortar lazos con el actor luego de su veredicto de culpabilidad, aunque no proporcionó detalles adicionales sobre su decisión. La sentencia de Majors ha generado un debate sobre la responsabilidad de las figuras públicas y las repercusiones de sus acciones en el ámbito profesional.
El abogado de Jabbari, Ross Kramer, calificó la sentencia como «grave y apropiada», destacando la valentía de su clienta por hablar sobre los efectos duraderos del comportamiento de Majors. Kramer espera que este caso inspire a otros sobrevivientes de violencia doméstica a romper su silencio y responsabilizar a sus agresores.
La situación legal y profesional de Jonathan Majors continúa siendo objeto de atención pública, mientras enfrenta las consecuencias de sus acciones y busca reconstruir su carrera en la industria del entretenimiento.