El físico de Zac Efron siempre ha generado conversación, desde los rumores de cirugía plástica en 2021 hasta la crítica por su “barriga de papá” en 2020. Sin embargo, fue en la película Baywatch (2017) cuando su imagen alcanzó el nivel máximo de musculatura, interpretando al salvavidas Matt Brody.
Ahora, el actor ha revelado que llegar a ese estándar de belleza no solo fue extremadamente difícil, sino también perjudicial para su salud.
El sacrificio detrás del físico de «Baywatch»
En una entrevista con Men’s Health publicada el 7 de septiembre de 2022, Zac Efron explicó que el entrenamiento para Baywatch incluía:
- Rutinas intensas que empezaban a las 4 de la mañana.
- Dietas estrictas, casi veganas, ricas en proteínas.
- Uso de Lasix, potentes diuréticos, para reducir al mínimo el agua en el cuerpo y lograr un aspecto definido.
“El look de Baywatch no creo que sea en verdad obtenible. Es falso, se ve como si fuera de CGI”, confesó el actor.
Consecuencias en su salud
Efron relató que el esfuerzo físico y mental le pasó factura:
- Desarrolló insomnio.
- Cayó en una depresión profunda.
- Experimentó agotamiento físico y mental.
“Me costó mucho volver a centrarme. Algo en esa experiencia me quemó”, admitió el actor, quien aseguró que solo comenzó a sentirse mejor seis meses después de dejar la rutina extrema.
Un nuevo enfoque en su vida
Tras esa experiencia, Zac Efron decidió no volver a someterse a entrenamientos tan demandantes. Hoy busca un equilibrio entre ejercicio, buena alimentación y salud mental, aceptando su cuerpo con un poco más de grasa corporal.
“¿Cómo sería no tener que estar en forma todo el tiempo? Lo probé, pero me sentí miserable. Ahora me concentro en la autorrealización y en encontrar mi ritmo”, explicó.