El Gobierno Nacional calificó el crimen del teniente coronel de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), Porfirio Cedeño Cedeño, como un reflejo del ‘estado de guerra’ que enfrenta la nación, confirmando que el estado de excepción, decretado previamente, seguirá vigente. El Ejecutivo prometió una respuesta ‘contundente’ contra los responsables del crimen, reforzando las medidas de seguridad y manteniendo las operaciones militares en las zonas de mayor riesgo.
«La voluntad, la entrega y la lucha la damos, pero las herramientas deben mantenerse», señala el comunicado oficial emitido por la Presidencia de la República.
Cedeño formaba parte del Grupo de Operaciones Especiales de la FAE y fue asesinado este miércoles en circunstancias aún no esclarecidas, en los exteriores de la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil.
Las autoridades iniciaron las investigaciones correspondientes para esclarecer los hechos y dar con los responsables del atentado. Además, solicitaron el apoyo de la ciudadanía a través del Plan de Recompensas.
La Fiscalía General del Estado abrió de oficio una investigación previa. Además, la entidad dispuso el levantamiento del cadáver, de información y de indicios balísticos (más de 20 casquillos de bala) en la escena del crimen.