La Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) se pronunció en contra del uso político de la Navidad, un día después de que el presidente Nicolás Maduro anunciara el «adelanto» de la temporada navideña al 1 de octubre. Aunque esta medida no implica cambios en las fechas festivas oficiales, afecta la decoración navideña en espacios públicos. La CEV expresó que la celebración de la Navidad es de carácter universal y su organización corresponde a la autoridad eclesiástica, rechazando cualquier intento de utilizarla con fines propagandísticos.
“La Navidad es una celebración de carácter universal. El modo y el tiempo de su celebración compete a la autoridad eclesiástica. Esta festividad no debe ser utilizada con fines propagandísticos ni políticos particulares”, afirmó la Conferencia en un comunicado oficial.
Mientras tanto, un informe reciente de la organización Human Rights Watch (HRW), divulgado este miércoles, reveló un incremento en la represión estatal tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. Según el reporte, el régimen chavista ha recurrido a la violencia y a tácticas autoritarias para sofocar las protestas que han estallado en diferentes regiones del país.
La ONG señaló que la administración de Nicolás Maduro continúa utilizando la represión como herramienta para controlar el descontento social y limitar el ejercicio de los derechos humanos, especialmente tras los comicios presidenciales.
HRW concluyó que la estrategia del chavismo incluye el uso sistemático de la fuerza para disuadir las manifestaciones, lo que ha generado preocupación a nivel internacional sobre la estabilidad democrática y el respeto por los derechos civiles en Venezuela.