En la era digital, una conexión WiFi rápida y estable es casi tan importante como tener luz o agua. Sin embargo, muchas veces la lentitud no se debe a tu proveedor de internet, sino a objetos comunes en tu hogar que interfieren con la señal del módem.
La señal WiFi viaja en forma de ondas electromagnéticas, y ciertos dispositivos y materiales pueden bloquear o distorsionar su trayectoria. Saber qué elementos evitar cerca del router puede mejorar notablemente tu experiencia de navegación.
Objetos que interfieren con la señal WiFi
- Microondas: Operan en la frecuencia de 2.4 GHz, la misma que muchas redes WiFi. Cada vez que se encienden, causan interferencias.
- Teléfonos inalámbricos y monitores de bebé: Los modelos antiguos también funcionan en la banda de 2.4 GHz, compitiendo con el WiFi.
- Superficies metálicas y espejos: Reflejan o bloquean las ondas, debilitando la señal.
- Electrodomésticos grandes: Como refrigeradoras o lavadoras, cuyos motores interfieren con la señal.
- Dispositivos Bluetooth: Comparten la banda de 2.4 GHz y pueden generar conflictos si están cerca del módem.
- Luces LED decorativas: Algunas, de baja calidad, emiten interferencias electromagnéticas.
- Muros sólidos y vidrio templado: Materiales densos como el concreto y superficies reflectivas como el vidrio templado reducen el alcance del WiFi.
Recomendaciones para mejorar tu red WiFi
- Coloca el módem en un lugar alto y central en tu hogar.
- Mantén alejados los objetos que interfieren con la señal.
- Activa la banda de 5 GHz si tus dispositivos son compatibles.
- Usa repetidores WiFi o un sistema mesh en casas grandes.
- Actualiza regularmente el software de tu router.
A veces, mejorar tu internet no requiere comprar nuevos equipos, sino reorganizar tu espacio y conocer qué afecta tu señal WiFi. Pequeños cambios pueden darte una experiencia de conexión más rápida, estable y sin interrupciones en cada rincón de tu casa.